¡No los tires!

Encontrados en cajas de zapatos o embalajes, en forma de paquetitos de azúcar, pero más pequeños todavía, están ellos: los paquetes de gel de sílice.

Por regla general según se abre el embalaje, nuestro primer instinto es tirarlos, pero según este artículo del diario Mirror, pueden hacer mucho más por nosotros, especialmente si el exceso de humedad es algo que tienes que tratar.

(Y recuerda, nunca debes ingerirlos, o dejarlos en un lugar donde los niños pequeños puedan llegar a ellos)